Uptown Girls: una comedia «en serio»

Brittany Murphy fue una de las artistas más queridas de los 90s y principios de los 2000. Mayoritariamente con roles en comedias románticas, Brittany tuvo personajes interesantes en otros géneros más demandantes. Probablemente su rol más dramático y menos recordado fue en la película «8 Mile», al lado del entonces estrella del rap Eminem. Una historía sombría sobre la clase trabajadora de Detroit, que llevó a la actriz a su interpretación más exigente en cuanto a calidad histriónica. Recordamos también cintas como el thriller «Dont say a word» y «Ramen» una película sentimentalona sobre el arte de cocinar uno de los platillos más distintivos del Japón.

La repentina muerte de Murphy en 2009 dejó su filmografía en una nada corta suma de 46 filmes, pero sin duda Uptown Girls, es una de sus películas más memorables, sobre todo por la mancuerna que hizo con una entonces pequeña Dakota Fanning, que era la actriz infantil del momento.

La trama

Molly (Brittany Murphy) es la hija heredera de un cantante de rock que tuvo su época de gloria, al fallecer le deja además de su fortuna su colección de guitarras. Molly tiene una vida caótica y sin rumbo definido que parece colapsar por completo cuando se ve despojada de su herencia por un fraude. Ahora tendrá que sobrevivir como cualquier persona, pagar una renta y buscarse un trabajo. Su falta de experiencia en cualquier ámbito le cierra las puertas de cada sitio al que aplica, la única salida será volverse niñera de la pequeña Ray (Dakota Fanning) hija de una pareja adinerada que con tan solo 8 años tiene una personalidad de adulto con severos problemas de actitud. Y el choque de personalidades hará que la vida de cada una cambie para siempre.

Una comedia no tan ligera

La mayoría de las comedias buscan temas ligeros que permitan una interacción más fluida de los personajes y cuyos trasfondos no sean demasiado complejos de explicar. Lo que da como resultado que muchas de estas películas carezcan de sustancia, o se sientan demasiado superfluas.

«Uptown Girls» toca temas de manera tangencial que la hacen ser más que una simple comedia, aunque el personaje que interpreta la pequeña Dakota pudiera parecer una exageración o rayar en lo ficticio, la verdad es que hay una gran cantidad de niños que viven su infancia más como adultos que como infantes. Y cuyos padres incluso ven esto como una virtud.

Esta cinta busca de alguna manera hacer una crítica sobre el trato distante que algunos padres tienen con sus hijos y que hacen que quien los cuida conozca más sobre ellos que sus progenitores. La historia se da tiempo de tratar incluso con el tema de la muerte de un padre, y cómo ambos personajes asimilan el evento, Ray aceptando y «creciendo» rápido para minimizar la pérdida, Molly no creciendo o siendo inmadura aún años después de la pérdida del suyo que siente inaceptable.

Y es este «defectuoso» personaje de Molly, un adulto desobligado y sin estructura el que nos muestra cómo se puede disfrutar la vida al ser un alma libre y sin ataduras. Pero que a final de cuentas necesita su dosis de seriedad para ponerle rumbo a su destino. Por eso el eslogan de la película refleja a la perfección el espíritu de la misma: «Ellas están a punto de enseñarse la una a la otra cómo debe comportarse alguien de su edad». Y así la caótica Molly aprende seriedad de la pequeña Ray, y ésta última aprende a ser más niña de la irreverente adulta.

En conclusión

Esta cinta es un viaje nostálgico a los 2000, si, así es; nostálgico. Porque se encuentra a un año de cumplir los 20 de estrenada, y cabe mencionar que las críticas entonces no fueron muy favorables, pero el paso del tiempo la ha colocado como un clásico de la época. Su director Boaz Yakin no tiene una filmografía muy amplia pero si diversa, y cuyo mayor éxito se remonta a una película previa a la comentada hoy. Nos referimos a «Remember the Titans», cinta del año 2000 sobre un coach de americano que inspiró a toda una generación a volverse aficionado o practicante de este deporte.