Sucedió una noche: la primera comedia romántica

Hoy en día cuando pensamos en películas románticas de inmediato se nos vienen a la cabeza varios títulos e incluso algunas favoritas. Cintas como «Tienes un e-mail», «La boda de mi mejor amigo» o «Año bisiesto» entre otras.

Es un género con el que ya estamos familiarizados, pero no siempre fue así. De hecho tuvo que haber un momento en el que surgió este género, y es precisamente la película de la que hablamos hoy la que es considerada como la primera comedia romántica de la historia. Nos referimos a «It hapened One Night» (Sucedió una noche) de 1934.

La trama

Ellie (Claudette Colbert) es hija de un famoso millonario, ambos sostienen una pelea porque ella se ha casado sin su permiso. Su padre considera que el hombre que ella ha elegido no es el apropiado. Y por ello Ellie decide huir y reunirse con su nuevo marido, el cual la está esperando en Nueva York para consumar el matrimonio.

Ella aborda un autobús con rumbo a su destino, tratando de pasar inadvertida mientras su foto es publicada en todos los periódicos del país. Es ahí donde conoce a Peter (Clark Gable) un periodista que está en busca de una buena nota. Al darse cuenta que la chica que viene sentada al lado es la prófuga millonaria por la que el padre ha ofrecido una recompensa. Decide ayudarla a reunirse con su marido a cambio de que le deje escribir un artículo al respecto. Al principio ambos encontrarán su presencia poco agradable, sin embargo en el transcurso del viaje esto cambiará por completo.

Otros tiempos

Resulta difícil imaginar un tiempo en el que no existieron las comedias románticas. Pero cuando uno ve esta película, es posible entender la razón de ello. Estamos hablando del inicio de los años 30, una época donde el pudor y las buenas costumbres estaban completamente arraigadas en la sociedad americana así como en el mundo entero.

Hasta ese entonces el romance era cosa seria, incluso dramática, bromear con una relación de pareja no era muy bien visto. Y mucho menos como lo aborda esta película, podríamos decir incluso que esta cinta fue más allá de los límites que se permitían en aquel entonces.

Como punto de partida está el hecho de que la protagonista ya está casada, y que empieza una relación amistosa con otro hombre, con el que eventualmente empieza a tener sentimientos. Esto sin duda ya era mal visto para la época.

Pero va al extremo cuando ambos tienen que pasar la noche en un motel y para guardar las buenas costumbres el protagonista construye una barrera con un lazo y una sábana que divide la habitación en dos. Aún con esta solución la crítica y percepción de el público en general fue de escándalo.

Hay una escena donde ambos protagonistas quedan varados a mitad de la carretera, teniendo que pedir lo que comúnmente llamamos un «aventón». El cual solía hacerse con un movimiento del puño cerrado y el pulgar erguido al pasar los autos. En dicha escena cuando Peter no tiene éxito en su cometido, ella se levanta y lo hace mostrando una de sus piernas levantándose la falda.

Esta parte incluso fue filmada con una doble, para evitar el bochorno de la actriz. Pero ella al ver la pierna de su sustituta en cámara, Claudette pensó que las piernas de la modelo no eran tan bonitas como las suyas. Y no iba a permitir que el público se quedara con esa impresión, obligando al director a filmarla a ella directamente sin ningún doble.

Nace el Screwball

Las «Screwball comedies» como se les denominó a estas cintas tenían las siguientes peculiaridades. El personaje femenino era más preponderante en la trama, la masculinidad de su co-protagonista era puesta prueba. Y además ambos provenían de distintas clases sociales.

Creando una especie de batalla de los sexos, que desarrolla una tensión distinta a cualquier otro tipo de relación romántica en pantalla. Esto desde luego era un punto de vista interesante y novedoso en aquel entonces, sin embargo a pesar de que ha pasado casi un siglo desde que comenzó este género. Aún en la actualidad esta fórmula funciona, lo que pone en evidencia el poco avance en equidad de género.

Una máquina del tiempo

Hoy al ver la mayoría de las situaciones que suceden en esta película nos resultan casi ridículas e infantiles. Ver la cinta tiene una intención un poco más histórica y de cultura general que de entretenimiento. No por ello la película deja de ser divertida, quizás no como la vería una persona de aquella época. Pero es divertido para nosotros por la comparación de usos y costumbres a casi un siglo de distancia y cómo podemos encontrar grandes discrepancias pero que también mantiene bastante similitudes.

Además, claro está, de ver a dos de las grandes estrellas del cine clásico de los Estados Unidos. Como lo es Clark Gable y Claudette Colbert, quienes mediante sus actuaciones nos muestran el tono de interpretación tan característico en los años 30. Cuando aún estaba lejos el llamado actor de método.

«Sucedió una noche» es una opción interesante para pasar una entretenida hora y media durante el fin de semana y por qué hacer un viaje en el tiempo y presenciar una época con sus propios sabores y texturas.